La Psicología Adleriana reconoce que el Ser humano como un ente social que busca pertenecer y trascender logrando los objetivos personales mediante una autoactualización, al mismo tiempo procurando contribuir para lograr un sentido de comunidad.
La Disciplina Positiva está basada en el trabajo de Alfred Adler (1870-1937) y Rudolf Dreikurs (1897-1972), ambos psiquiatras vieneses. Una de las fortalezas de la Disciplina Positiva es su fundamentado marco teórico, el cual presenta al entendimiento de la conducta a partir de las emociones, creencias y calidad de las relaciones sociales.
Implementar la Disciplina Positiva entrelaza la enseñanza de las habilidades socio-emocionales y el desarrollo del carácter en el día a día. Esta filosofía de vida está basada en valores de convivencia.
Lynn Lott y Jane Nelsen adaptaron la obra de Adler y Dreikurs y diseñaron actividades que conforman los talleres de Disciplina Positiva, éstos talleres se imparten internacionalmente y se basan en métodos vivenciales que ayudan a las personas a apropiarse de la teoría de una manera práctica y así descubrir lo que realmente funciona y lo que no; lo que se piensa, siente y decide de acuerdo a los diferentes enfoques de conviviencia para llevarlo a su vida diaria.
Algunos de los principios de la Psicología Adleriana son:
- Respeto mutuo.
- Errores como oportunidades de aprendizaje.
- Entendimiento de la Lógica Privada.
- Enfoque a soluciones.
- Sentido de Pertenencia e Importancia.
- Sentido de Comunidad y Cooperación.